DUERME y DESINTOXICA tu HÍGADO
El estrés, la mala alimentación y el sedentarismo pueden afectar nuestra salud y el funcionamiento de nuestro hígado. Por eso, es importante darle un descanso y permitir que se recupere para seguir haciendo su trabajo correctamente.
¿Estás luchando para dormir profundamente? ¿Buscas una forma natural de desintoxicar tu hígado?
¿Alguna vez te has preguntado cómo puedes mejorar tu calidad de sueño y cuidar tu hígado al mismo tiempo?
¿Sabías que hay un te natural que puede ayudar a mejorar tu hígado y mejorar tu salud en general?
¿Cómo alcanzar ese PESO SALUDABLE?
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El hígado es uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo.
Es responsable de realizar una gran cantidad de funciones vitales para mantenernos saludables.
Algunas de las tareas más importantes del hígado incluyen la producción de bilis, que ayuda en la digestión de las grasas, y la eliminación de sustancias tóxicas del cuerpo. La bilis también le da el color a la materia fecal.
Además, el hígado también es responsable de almacenar vitaminas y minerales importantes para nuestro organismo, como la vitamina A, el hierro y el cobre. Sin un hígado sano, nuestro cuerpo no sería capaz de funcionar de manera adecuada.
Aunque el hígado es un órgano resistente, también es susceptible a daños y enfermedades.
Una de las condiciones más comunes que afecta al hígado es el hígado graso no alcohólico.
Es una afección en la que hay una acumulación excesiva de grasa en el hígado, incluso si no se consume alcohol o se consume en pequeñas cantidades.
Esta condición es común en personas obesas, con diabetes tipo 2, resistencia a la insulina, colesterol alto. También se ha observado una estrecha relación con aquellos que tienen presión arterial alta.
¿Cómo se produce el hígado graso no alcohólico?
La acumulación de grasa en el hígado se produce cuando el hígado no puede descomponer las grasas de manera eficiente. La grasa se acumula en las células del hígado, lo que puede causar inflamación y daño hepático. Además, la resistencia a la insulina y la obesidad también pueden contribuir a la acumulación de grasa en el hígado.
Entre los alimentos que pueden producir el hígado graso no alcohólico se encuentran aquellos con alto contenido de grasas saturadas y trans, como los alimentos fritos, las carnes procesadas y las comidas rápidas.
El inconveniente es que estos alimentos pueden producir inflamación.
En términos generales La inflamación es un proceso natural del cuerpo que ocurre cuando se produce una lesión o infección. Es una respuesta protectora que ayuda a reparar el daño y combatir los gérmenes. Sin embargo, cuando la inflamación se vuelve crónica, puede causar daño a los tejidos y órganos del cuerpo.
Cuando el cuerpo está inflamado, el hígado también puede inflamarse. Esto se debe a que el hígado es responsable de procesar muchas de las sustancias que el cuerpo produce en respuesta a la inflamación. Si el hígado está trabajando constantemente para procesar estas sustancias, puede sufrir daño y su función puede verse afectada. Entonces estos alimentos pueden causar inflamación en el hígado y contribuir a la acumulación de grasa.
También se ha demostrado que el consumo excesivo de azúcar y carbohidratos refinados puede contribuir a la acumulación de grasa en el hígado.
Por lo tanto, es recomendable limitar el consumo de bebidas azucaradas y alimentos procesados con alto contenido de azúcar y carbohidratos refinados.
El hígado graso no alcohólico puede llevar a inflamación hepática, fibrosis y finalmente, cirrosis del hígado. También es un factor de riesgo para la aparición del cáncer de hígado.
DUERME y DESINTOXICA tu HÍGADO
Cuáles son los Síntomas del hígado graso no alcohólico?
Esta condición puede no presentar síntomas en las primeras etapas. Sin embargo, a medida que la enfermedad progresa, pueden aparecer síntomas como fatiga, dolor abdominal, pérdida de peso inexplicable y debilidad.
¿Cómo se diagnóstica el hígado graso no alcohólico?
El diagnóstico se realiza mediante una combinación de pruebas , como análisis de sangre, ecografía abdominal y en algunos casos biopsia hepática. Es importante diagnosticar la enfermedad temprano para poder tratarla de manera eficiente y prevenir complicaciones hepáticas.
Bueno y el tratamiento del hígado graso no alcohólico incluye cambios en el estilo de vida, como hacer ejercicio regularmente, perder peso y seguir una dieta saludable. También puede ser necesario tomar medicamentos para controlar los niveles de azúcar en la sangre y el colesterol y triglicéridos. En casos graves, se puede necesitar una intervención quirúrgica para tratar la enfermedad.
Entonces cuál es esta bebida que puede ayudarte a desintoxicar el hígado.
Te voy a hablar el te de manzanilla, jengibre y limón.
Antes de la receta super fácil, que te voy a enseñar, veamos los beneficios de estos alimentos
La manzanilla es una hierba popular utilizada en la medicina tradicional para tratar problemas digestivos, ansiedad y problemas de sueño.
También tiene propiedades antiinflamatorias, por lo que puede ayudar a reducir la inflamación en todo el cuerpo.
Un artículo de revisión: muestra que varios estudios han encontrado que la manzanilla puede tener efectos protectores del hígado. Por ejemplo, se ha demostrado que reduce la inflamación en el hígado y previene la oxidación de las células hepáticas. También se ha demostrado que ayuda a reducir los niveles de enzimas hepáticas elevadas, lo que indica que puede estar protegiendo al hígado de daños adicionales.
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Por otro lado, el jengibre es una raíz picante que se ha utilizado para tratar problemas digestivos, náuseas, dolores de cabeza y dolores musculares.
También tiene propiedades antiinflamatorias, lo que lo hace útil para reducir la inflamación.
En este estudio, los investigadores encontraron que el 6-gingerol, un compuesto natural que se encuentra en el jengibre, puede ayudar a prevenir y tratar la esteatosis hepática es decir el hígado graso.
Se ha demostrado que este 6-gingerol tiene propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y anticancerígenas, y se ha utilizado para tratar una variedad de condiciones médicas.
¿Cómo actúa esta sustancia para mejorar esta esteatosis hepática?
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En el estudio, los investigadores examinaron los efectos de esta sustancia en ratones que habían sido alimentados con una dieta alta en grasas para inducir inducir el hígado graso. Descubrieron que el 6-gingerol redujo significativamente la acumulación de grasa en el hígado y mejoró la sensibilidad a la insulina en los ratones.
Los investigadores también encontraron que el 6 -gingerol produjo una disminución de la síntesis de ácidos grasos y una disminución de la acumulación de grasa en el hígado.
El jengibre se puede utilizar fresco o seco en una variedad de platos, como curry, sopas, ensaladas y marinados. Y en bebidas como la que te voy a contar.
Y el limón es rico en vitamina C, un antioxidante que puede ayudar a fortalecer el sistema inmunológico. También puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. Además, el limón agrega un delicioso sabor cítrico al té de manzanilla y jengibre.
Entonces esta es una receta fácil y rápida para hacer el té que te recomiendo consumir una hora antes de acostarte.
La preparación te sirve para cuatro tazas.
Tomas una taza y guardas en la nevera las otras tres para los días siguientes y así ahorras tiempo o las compartes con quién quieras.
Ingredientes:
- 2 bolsas de té de manzanilla o dos cucharadas de flores de manzanilla.
- 1 cucharada de jengibre rallado fresco o 1/2 cucharadita de jengibre molido
- 1 limón
- 4 tazas de agua
- Estevia como edulcorante opcional
Preparación:
- En una olla, calienta 4 tazas de agua hasta que esté a punto de hervir.
- Agrega 2 bolsas de té de manzanilla y la cucharada de jengibre rallado.
- Reduce el fuego y deja que el té se cocine a fuego lento durante 5 minutos.
- Retira la olla del fuego y deja que el té se enfríe durante unos minutos.
- Si lo necesitas, cuela el te en un recipiente vacío.
- Exprime el jugo de un limón en el té y revuelve bien.
- Agrega estevia si deseas un sabor dulce.
- Sirve caliente y disfruta.
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Escríbeme en los comentarios si te gustó el té.
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Referencias científicas
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/34139323/