La obesidad ha alcanzado proporciones epidémicas en todo el mundo.
Según las estadísticas mundiales, el número de personas obesas continúa aumentando.
En 2016, más de 1.900 millones de adultos mayores de 18 años tenían sobrepeso. De estos, más de 650 millones de adultos eran obesos.
En 2016, el 39% de los adultos mayores de 18 años (39% de los hombres y el 40% de las mujeres) tenían sobrepeso.
En general, alrededor del 13% de la población adulta mundial (11% de los hombres y 15% de las mujeres) eran obesos en 2016.
La prevalencia mundial de la obesidad casi se triplicó entre 1975 y 2016.
La obesidad está en aumento
Uno de los objetivos de los médicos es reducir la obesidad entre los adultos en más de la mitad para el año 2025. Sin embargo, los datos actuales sugieren que la situación está empeorando. Debido al aumento de las tasas de obesidad infantil, la esperanza de vida del occidental promedio podría disminuir de dos a cinco años en las próximas décadas, a menos que se realicen grandes esfuerzos para frenar las tasas crecientes de obesidad.
Además, la obesidad es un factor de riesgo de enfermedad cardíaca y otras complicaciones graves de salud:
La obesidad es un factor de riesgo para diabetes tipo 2, presión arterial alta y colesterol alto. Tener estos trastornos al mismo tiempo es una afección llamada síndrome metabólico, que puede conducir a un mayor riesgo de enfermedad cardíaca y renal.
La presión arterial alta, un factor de riesgo de enfermedad cardíaca, es dos veces más común en adultos obesos que en aquellos que tienen un peso saludable.
La obesidad también puede provocar artritis, que es causada por el estrés en las articulaciones.
Un probable disparador de enfermedades del corazón
La obesidad, el colesterol alto y la presión arterial alta son un grupo común de factores de riesgo para las personas con enfermedades cardíacas. El manejo de todos estos factores de riesgo ayudará a reducir el riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular.
Lo que puedes hacer hoy
El sobrepeso y la obesidad juntos representan la segunda causa de muerte evitable en el mundo, después de fumar. Hay muchas cosas que puedes hacer para controlar su peso y ayudar a controlar su riesgo de enfermedad cardíaca:
Desarrolla un plan de dieta y ejercicio que consideres realista y que puedas mantener.