Aprende sobre el Síndrome De Ovario Poliquístico (SOP) y cómo una dieta baja en carbohidratos puede ayudar potencialmente a muchas mujeres cuya fertilidad se ve amenazada por esta afección.
Y descubre por qué una mujer de 40 años que había estado siguiendo la dieta Atkins durante un mes había ingresado recientemente en cuidados intensivos.
El SOP es una condición que tiene un fuerte impacto en la fertilidad de la mujer y afecta entre el 5% y el 10% de las mujeres en edad fértil. Debido a que el cuerpo de una mujer no produce suficientes óvulos cuando sufre de PCOS. Entonces se puede causar infertilidad y contribuir a las dificultades para quedar embarazada.
La mayoría de los casos de SOP no son genéticos, pero todos están relacionados con anomalías hormonales. La razón por la que no se producen suficientes óvulos se debe a un exceso de andrógenos u hormonas “masculinas”.
Tanto hombres como mujeres tienen hormonas andrógenas, pero los hombres las tienen en cantidades mucho mayores.
Este desequilibrio hormonal significa que los quistes que son parte normal de la producción de óvulos no crecen. Entonces, una mujer con SOP tiene muchos quistes pequeños en sus ovarios que no maduran para liberar sus óvulos. Normalmente, una vez que ocurre este proceso, los quistes desaparecen.
Otra consecuencia de los niveles más altos de hormonas andrógenas es el aumento del riesgo de obesidad, enfermedad cardíaca. También la diabetes, así como la probabilidad de tener más vello facial.
Curiosamente, las dietas bajas en carbohidratos como La Dieta de La Zona pueden ayudar a las mujeres con sobrepeso con SOP. Se realizó un estudio reciente de 11 mujeres con sobrepeso y no diabéticas con SOP que tenían una edad promedio de 33 años.
El estudio comparó una dieta “estándar” con un 56% de carbohidratos y un 16% de proteínas, con una dieta baja en carbohidratos del 43% y 15% de proteínas.
El componente graso de la dieta baja en carbohidratos fue mucho mayor que la dieta estándar, en un 14%. Esto es más alto de lo que sería en la dieta de la zona.
El contenido de grasa de la dieta baja en carbohidratos se dividió casi en partes iguales entre los ácidos grasos poliinsaturados y los ácidos grasos monoinsaturados.
El contenido de grasa de la dieta estándar se dividió casi equitativamente entre los dos tipos de ácidos grasos, pero fue ligeramente superior (en un 3%) en la variedad monoinsaturada.
También se comparó una tercera dieta, una alta en carbohidratos y en ácidos grasos monoinsaturados. Los participantes del estudio solo siguieron cada dieta durante 16 días. Tuvieron un descanso de 3 semanas entre cada dieta, y probaron los 3.
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Los investigadores se interesaron en descubrir si una dieta baja en carbohidratos podría reducir la cantidad de insulina que circula en el cuerpo.
Los investigadores creyeron que esto tendría un efecto indirectamente positivo en el SOP.
Los resultados de este estudio encontraron que, mientras que las hormonas que circulaban no se vieron significativamente afectadas por la dieta baja en carbohidratos. En cambio el colesterol de la mujer, los niveles de insulina en ayunas, los ácidos grasos libres y su respuesta a la insulina se vieron afectados positivamente.
Las respuesta mejorada a la insulina indica el posible beneficio de una dieta baja en carbohidratos para quienes padecen SOP. Puede ser que los niveles de insulina no se afectaran en mayor grado por tratarse de una dieta de 16 días.
Los autores del estudio afirman que: “Debido a que se cree que la insulina elevada contribuye a las anomalías endocrinas en el SOP, se esperaría que una reducción en la insulina finalmente dé como resultado un perfil endocrino mejorado”.
Continúan diciendo que estas mejoras indican que el uso de una dieta baja en carbohidratos, con una menor ingesta de calorías, probablemente beneficie a las mujeres con sobrepeso que sufren de SOP.
Sin embargo, no todas las dietas bajas en carbohidratos son iguales.
La dieta de Atkins se ha asociado con un mayor riesgo de problemas cardíacos para algunos, además de estar implicada en la hospitalización de otros.
Una mujer de 40 años fue hospitalizada con niveles muy altos de ácidos en la sangre como resultado de seguir estrictamente la dieta de Atkins durante aproximadamente un mes. La liberación de ácidos en la sangre, llamada cetosis, es un indicador del “éxito” de la dieta Atkins, y en realidad es un resultado del proceso de privar al cuerpo de ciertos nutrientes más allá de un nivel umbral. El nutriente es, por supuesto, carbohidratos.
Los carbohidratos son una fuente de energía para el cuerpo, la única fuente utilizada por el cerebro. Pero cuando el cuerpo se ve privado de carbohidratos después del nivel umbral, utilizará métodos alternativos de metabolizar la energía. Utiliza grasas almacenadas y proteínas, pero esta no es una forma muy eficiente biológicamente de producir energía para el cuerpo. Entonces, hay muchos productos metabólicos ácidos, llamados cetonas. Estos se liberan en el torrente sanguíneo, para ser excretados por el cuerpo.
En el caso de esta mujer, estos productos metabólicos no se excretaron lo suficientemente rápido y se acumularon en su torrente sanguíneo.
Ella estaba vomitando de 4 a 6 veces al día. Esta acumulación de ácidos sanguíneos representaba una situación peligrosa y ella ingresó en cuidados intensivos.
La Fundación Atkins respondió que esta mujer debe haber tenido problemas metabólicos o clínicos anormales. Pero dado que esta mujer, que era obesa, se encuentra en una categoría en la que se comercializa la dieta Atkins, hay un motivo real de preocupación aquí. Con la obesidad, hay una mayor probabilidad tanto de problemas médicos generales como de problemas metabólicos.
Si una persona obesa no tuviera problemas metabólicos de una forma u otra, no sería obeso. Tal vez hubo circunstancias que fueron particulares de esta mujer aquí, pero hasta que esos peligros potenciales se entiendan más completamente, este es un problema significativo. Es irónico que una dieta implique que no sea adecuada para personas con problemas metabólicos, especialmente si esta dieta se comercializa como una “forma de vida”, es decir, se recomienda para un uso a largo plazo.
Así que lo que te recomendamos es que restrinjas los carbohidratos, pero no demasiado, hasta el límite de la dieta de Atkins, sino controlado.
