La nutrición es clave para prevenir la enfermedad coronaria y el daño al corazón.
Si quieres construir un estilo de vida saludable y activo, es necesario evitar alimentos que te hagan daño para el corazón y demás órganos vitales.
Estos son los 5 peores alimentos para tu corazón.
1. Carbohidratos refinados
Durante el procesamiento, los granos refinados se despojan del salvado y el germen, dos partes del grano que contienen una gran cantidad de nutrientes. El producto final es un almidón sin casi ningún valor nutricional, que proporciona poco más que carbohidratos y calorías.
Los carbohidratos refinados se pueden encontrar en una amplia variedad de alimentos, que incluyen pan blanco, pasta y arroz, magdalenas, pasteles, galletas, galletas saladas y bagels. Desafortunadamente, estos alimentos constituyen una porción bastante abundante de la dieta occidental moderna y pueden estar relacionados con un mayor riesgo de enfermedad cardíaca.
Un estudio realizado en China, por ejemplo, encontró que una mayor ingesta de carbohidratos, principalmente de granos refinados, se asoció con un mayor riesgo de enfermedad coronaria entre 117,366 adultos.
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2. Soda o Gaseosas Con Azúcar Añadido
Salir del refresco es una de las mejores cosas que puedes hacer por tu corazón. Además de estar cargado de productos químicos controvertidos e ingredientes poco saludables, la soda también rebosa de azúcares añadidos.
El azúcar es uno de los principales culpables de la enfermedad cardíaca. Los azúcares agregados de alimentos como dulces, postres, jugos y refrescos pueden aumentar los niveles de azúcar en la sangre, dañar los vasos sanguíneos, sobrecargar el hígado y aumentar el riesgo de enfermedades del corazón.
Curiosamente, un estudio de la Escuela de Salud Pública de Harvard descubrió que los participantes que bebían la mayor cantidad de bebidas endulzadas con azúcar tenían un 20 por ciento más de riesgo relativo de desarrollar enfermedad coronaria que quienes bebían la cantidad más baja. El consumo de bebidas azucaradas también se asoció con niveles más altos de triglicéridos y marcadores de inflamación, además de niveles más bajos de colesterol bueno HDL.
3. Margarina
La margarina generalmente tiene un alto contenido de grasas trans, un tipo de grasa que los fabricantes de alimentos suelen usar para mejorar el sabor de los alimentos y alargar la vida útil, a costa de su salud.
Idealmente, las grasas trans deben eliminarse completamente de tu dieta. Un estudio encontró que el riesgo de cardiopatía coronaria se duplicó con cada aumento del 2 por ciento de las calorías de las grasas trans. Otro investigador incluso llegó a la conclusión: “En una base por calorías, las grasas trans parecen aumentar el riesgo de cardiopatía coronaria más que cualquier otro micronutriente”.
Opta por mantequilla orgánica o mantequilla de búfalo, alimentada con pasto, en lugar de margarina, y limite también otras fuentes de grasas trans, incluidos pasteles, galletas, rosquillas y galletas comprados en la tienda.
4. Carnes procesadas
En los últimos años, se han realizado numerosos estudios que relacionan las carnes procesadas, como los perritos calientes y la carne para el almuerzo, con una serie de efectos adversos sobre la salud. No es sorprendente que las carnes procesadas también puedan afectar negativamente la salud del corazón.
Las carnes procesadas se llenan de aditivos y conservantes que pueden ser nocivos para la salud. También contienen compuestos químicos potencialmente peligrosos como aminas heterocíclicas y nitritos, que se han relacionado con enfermedades como el cáncer. También tienden a ser altos en sodio, lo que puede afectar la presión arterial en aquellos que son sensibles a la sal.
No solo eso, sino que una revisión publicada en la revista Circulation realmente encontró que la ingesta de carne procesada está asociada con un mayor riesgo de enfermedad coronaria y diabetes.
5. Refrigerios salados
Los refrigerios salados como las papas fritas, los pretzels y las palomitas de maíz para microondas están llenos de ingredientes adicionales que pueden afectar seriamente la salud de tu corazón. También están cargados de sodio, lo que puede aumentar la presión sanguínea, ejerciendo presión adicional sobre el corazón y debilitándolo.
Las pautas dietéticas más recientes recomiendan limitar la ingesta de sodio a menos de 2,000 miligramos por día. Para las personas con hipertensión, recortar el consumo de sal eliminando alimentos como los aperitivos salados de la dieta puede llevar a reducciones significativas en la presión arterial.
